Es posible que hayas escuchado hablar acerca de la polisomnografía, pero no sepas exactamente qué es y en qué consiste. O puede que ni siquiera hayas escuchado este palabro.
Sea como fuere, en el artículo de hoy, te vamos a contar todo lo que debes saber acerca de la polisomnografía. Analizaremos qué es, para qué sirve y por qué se realiza.
¿Qué es la polisomnografía?
La polisomnografía, también conocida como estudio del sueño, es una prueba completa que se realiza mientras el paciente está dormido. Se trata de una prueba no invasiva y totalmente indolora.
El principal objetivo de esta prueba es analizar los distintos ciclos y fases del sueño del paciente, con el fin de establecer un diagnóstico preciso sobre los distintos trastornos del sueño.
Esta prueba integral permite medir diferentes parámetros para su posterior análisis. Algunos de ellos son:
- Las ondas cerebrales
- Los niveles de oxígeno en sangre
- La frecuencia respiratoria y cardiaca
- Los movimientos oculares
- El movimiento de las piernas durante el sueño
- El tiempo que se tarda en conciliar el sueño
- El flujo de aire inhalado y exhalado
- La frecuencia de las apneas
¿Dónde se hace la polisomnografía?
La polisomnografía se lleva a cabo en una habitación especialmente habilitada para ello en la Unidad del Sueño de un hospital o una clínica especializada. En raras ocasiones, y sólo cuando se quiere diagnosticar la apnea obstructiva del sueño, se puede realizar la prueba en el hogar del paciente, aunque no es lo habitual ya que la cantidad de sensores es muy limitada.
Por lo general, esta prueba se realiza durante la noche, aunque en los casos de personas con turnos nocturnos y cambios continuos de horario, se puede realizar durante el día para así analizar la calidad del sueño en el horario habitual de la persona.
¿Por qué se realiza la polisomnografía?
El principal objetivo por el que se realiza esta prueba es poder diagnosticar adecuadamente cualquier tipo de trastorno del sueño, como pueden ser la apnea del sueño, la narcolepsia o el insomnio.
Además, es de gran utilidad para iniciar o ajustar un tratamiento ya existente para pacientes con un diagnóstico de trastorno del sueño.
La polisomnografía controla y recaba información acerca de las diferentes etapas y ciclos del sueño para poder identificar si se interrumpen los patrones del sueño, el motivo y el momento.
¿Cuándo es recomendable realizar una polisomnografía?
De manera generalizada, un médico te recomendará que te sometas a una polisomnografía cuando haya sospechas de la existencia de un trastorno del sueño: roncar fuerte y frecuentemente, somnolencia durante el día, problemas para conciliar el sueño, apneas, interrupciones del sueño…
Además, el facultativo suele recomendar una polisomnografía cuando hay sospechas de:
- Apnea del sueño y otros trastornos relacionados con el sueño
- Narcolepsia
- Síndrome de piernas inquietas
- Insomnio crónico sin causa aparente
- Conductas inusuales durante el sueño
- Movimientos oculares rápidos durante el sueño
Esperamos que, tras la lectura de este artículo, conozcas un poco más en detalle qué es la polisomnografía, así como cuándo se recomienda la realización de esta prueba y para qué sirve.